“NO HAY CAMINO PARA LA PAZ, LA PAZ ES EL CAMINO”.

Mahatma Gandhi
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miércoles, 22 de diciembre de 2010

martes, 26 de octubre de 2010

HOMBRE ¿QUÉ HAS HECHO DE TI?


Teníamos un pacto, insististe hasta el infinito por este paraíso planetario hasta que lo conseguiste. Era ayer cuando ponías sobre el mantel del universo una propuesta que nos convenció a todos por sentida y honesta; prometías servicio, cuidados, mantenimiento, respeto por la vida y todo lo existente. Llegaste a ofrecer tu evolución como garantía de tu entrega, sabías que al conseguir el beneplácito de los Maestros nos comprometías a todos en tu empresa, fuiste advertido y no quisiste quedarte ahí al ir mas allá, pues solicitaste la muerte como proceso de Transformación con mayúsculas. Todo te fue concedido tal y como lo expusiste.

Hoy, asistimos de nuevo todos los entonces presentes, obedeciendo al pacto que creaste y aceptaste con fervor. Pediste también ser tú mismo el que te evaluara al final de la enseñanza y que los demás presenciáramos tu labor hasta el final. Bien, aquí nos tienes, servidores de mundos a la cita convenida. Hombre, criatura divina, dinos ¿qué has hecho de ti?.

viernes, 7 de mayo de 2010

PENSANDO EN TI


Vuelvo al camino y me he tropezado con tu mirada, grande, abierta y viva. No sé tu nombre, edad, ni procedencia y tengo ya tanto que agradecerte. Esos dos luceros negros, profundos, plagados de interrogantes y anhelos me han provocado la marcha. La marcha hacia adelante pero con decisión de marcar bien el ritmo y el destino, no la de tocata y fuga hacia ninguna parte a toda mecha.

Has tenido que sufrir todas tus perdidas de un golpe terrible y demoledor para que yo reaccionara, debo pedirte perdón, pues tú ya existías antes que nada. Eras como todos los demás un alma errante, que valiente un día descendió al paraíso prometido y se encontró que estaba en obras, chapuzas mas bien.

Somos un poco desastrosos y muy descuidados con el Amor al prójimo, va a ser que tampoco nos queremos bien a nosotros mismos, si no esto no puede entenderse. ¿Quién nos dará la luz cuando oscurezca fuera y tengamos el alma apagada en las entrañas?. Cómo puede ser que, sólo pensando en ti, renuevo fuerzas para replantearme mi vida.

viernes, 16 de abril de 2010

DESPERTAR


Hay una música profunda viajando por el Cosmos, las esferas que habitan el universo vibran en un nuevo sentir y sus ecos viajan a velocidades supersónicas, expandiéndose y llenándolo todo con serenos impulsos de Paz y Amor.

Esas energías arriban a nuestras orillas interpenetrando las capas, sutiles, electromagnéticas, atmosféricas, biosféricas, placas tectónicas, mares, hielos, rocas y minerales, venas gaseosas, áuricas…, hasta alcanzar el corazón del planeta Tierra. El Magma de su mar central incandescente late impulsado por una fuerza renovada. El mundo se revuelve, sacude y tiembla como un adolescente sintiéndose provocada por cambios intensos..., los humanos sentimos, sufrimos las consecuencias de su transformación.

No somos ajenos, ni mucho menos, estamos totalmente condicionados, implicados en cuerpo y alma con el planeta y, aunque lo hubiéramos olvidado o guardado en el fondo de un cofre que arrojamos lejos de nuestra consciencia, lo cierto es que han hecho falta dolores, penas, desastres naturales para que volviéramos a dirigir la atención de donde nunca debería haberse ido. Somos el Planeta y Él es Nosotros.

Las estaciones llegan abruptamente a la superficie, la savia emerge con violencia hasta las yemas tímidas hasta hace dos días y hoy, se abren a la luz de un sol que se mezcla con vientos veloces, ciclogénesis, inundaciones, olas de frío/calor, temblores. Nuestro cuerpo, nuestra salud, estado anímico, se solidariza con la brusquedad de los cambios y fluctúan al unísono obligándonos a profundizar en la conexión con nuestra propia vida, historia personal, emociones íntimas, al mismo tiempo que se refleja en el exterior de nuestras vivencias, relaciones, amistades, familiares, todo lo que está sucediendo multidimensionalmente en el Mundo Entero.

La vida está despertando a otro nivel de su evolución, nosotros irremediablemente vamos a ir acompañando esta transformación, es hora de Despertar y demostrar que estamos presentes y conscientes en este Mágico y Transcendente Despertar Global.



jueves, 18 de marzo de 2010

UN LUCERO DUERME


Ahí está, como una alfombrilla al sol, su pequeño cuerpo de un mes en esta tierra apenas es una manchita oscura en el verde campo. Lucha contra el sueño porque quiere estar presente en cada instante de su vida, tiene tanta energía que te agota con solo observarle. Mientras su padre y hermano juegan en el prado vecino, él disfruta de la tranquilidad de la presencia de su mamá vigilante a su cuidado.

Se tumba por momentos entre la hierba y parece que ésta le hace una cuna a su medida, recoge una patita delantera mientras las restantes relajadas se extienden plácidas al cielo, la tripilla se infla al cielo y su pelaje negro tizón brilla acharolado al sol que juega con las nubes. Todo él parece un peluche, sin embargo, ese relax se mantiene a medias, su morrete denota cierta tensión, pero sólo es por un segundo mientras se termina por rendir al sueño que necesita, aun quedaran como vigías sus orejillas delatando parabólicamente su vigilia automática, es una presa.

Mientras él confía, el entorno le envuelve, el viento le trae ecos de otras manadas, las sombras que planean sobre el valle pertenecen a los cuidadores del cielo y velan sus sueños. La familia está cerca y la vida, sólo es un mágico instante sucedido por otro recorriendo el espacio sin fin.

lunes, 15 de febrero de 2010

EL SÉPTIMO VELO


Y decidió la doncella deslizar su último velo, un ligero nudo lo unía a la red de su recogido cabello, un pequeño gesto y un tobogán de dulzura fue revelando la belleza de su pelo negro, un brillo intenso y sano iluminaba con su contraste la blancura que hasta entonces lo guardaba.

Los invitados al festejo no daban crédito a las intensidades de sus sensaciones, sólo un gesto los delataba como los entusiasmados que eran y sin duda las bocas abiertas dejaron su huella para la posteridad, -no es para menos- se justificaban unos a otros pues la escena no tenía parangón.

Mas allá del sonido de las flautas y los olores que despedían las guirnaldas de flores al flotar en el ambiente cual nube de colores, miles de pétalos de las más bellas flores revoloteaban con la suave brisa de Mayo. Fue en ese instante que los gestos parecieron salirse de su encuadre natural, las caras ya no contenían mas sentimientos ni asombros, todo se desbordaba, cuando no pudiendo imaginar más, la verdad más bella se fue descubriendo tras ese ultimo y séptimo velo blanquísimo de la doncella.

Si decir bella es mucho, se nos queda corto el lenguaje. Si describir asombro y deleite es privilegio del gesto humano, no le llegamos con nuestra mejor expresión del rostro. Si alguna vez quisimos imaginar en nuestros mejores ensueños lo precioso de la vida, ni por mucho nos acercamos siquiera a sospechar tal nivel de perfección.

No eran ojos, ni nariz ni boca lo que el descubrimiento desveló, ni siquiera eran una figura, una piel un aroma o el brillo de una luz lo que allí se mostraban como el CANON de lo superior y magnifico. No se daba crédito y, sin embargo, en los gestos reflejados de la visión extraordinaria había un asentimiento profundo del resonar de lo cierto y lo autentico que sólo el corazón puede reconocer.

Mil caras se reflejaban en el limpísimo cristal de la belleza pura, todas las razas se atisbaban en su tesoro contenido, los colores de la variedad más extensa, el calor más tibio y confortable, la más mágica de todas las verdades se revelaba con la sencillez de quien se sabe UNO con TODO y simplemente UNO en sí mismo.

No es una doncella, ni una figura humana, no un idioma, ni raza, ni filosofía, ni ciencia circunscrita a una época o historia determinada. No, sólo UNO y en ello el más misterioso de los múltiples sentidos, el rostro del Amor hecho un gesto de complicidad con la raza humana que lo observa, y al instante siguiente o a la vez en el tiempo, ese mismo gesto interpretado desde otro nivel de comprensión con otro ser distinto que le dirige su atención, animal, mineral, elemento puro o variante en su multiplicidad.

El séptimo velo desveló la verdad desnuda con tal sencillez y confianza que no pudo ser resistida en su tentación más profunda. El ser humano tiene un recorrido interno indispensable que hacerse por y pro sí mismo. Ese viaje es único, singular, intransferible y sin duda ninguna, el más rico tesoro por descubrir en uno mismo. La belleza es tu reino, la pureza tu signo, el poder el sello que te honra y el AMOR tu único destino.


viernes, 5 de febrero de 2010

CUANDO HUYEN LAS SOMBRAS

En esa hora hechizada del día, cuando el cielo se va apagando y algo envuelve el aire hasta transformarlo en el encuadre del paisaje, comienza el proceso de interiorización de las almas, es como un timbre silente que asciende desde fondos insondables aún, para ir volcando en el instante presente, en la atención que se decide libremente mantener en vigilia y, todo sucede. Observar la transformación de la luz, el brillo y matices del ensobrado violeta sobre montado por las colinas hasta convertirlo en un gris plata que inunda la emoción hasta desbordarla, mansa, serena, invitada de lujo en los preludios deseados a tal efecto.

Imperceptiblemente la luz invierte su fuente, abandona las alturas para descender y empaparse en la Tierra, el verde alcanza luminosidad fosforescente en la copa de los árboles, los picos descarados devuelven con orgullo reflejos de poder prestado por el Sol y parecen provocarle a que repita la gesta una vez más, como un duelo de intenciones comprendidas por ambas partes y, sin embargo, eternamente apostados con placer y complicidad.

Todo quedará aquí, todo ha estado siempre aquí, algunos pasean la mirada sin ver los detalles, otros gravan en sus pupilas un cliché estandarizado pues consiguen conciliar su visión a las expectativas indicadas. Algunos, callan y mantienen los ojos fijos en un punto invisible para el resto, permanecen un tiempo así como hipnotizados por algo que ya no está fuera, le han dado permiso a su ser más elevado, el relevo de la dirección.

Piden quedarse, amanecer en el estado de quietud que han conquistado y tanto bien les hace, desayunar en silencio, saboreando el folclore de tonos naranjas y violetas con los que se enseñorea el sol al despertar. Casi ni preguntan, apenas un par de pinceladas tímidas en asuntos prácticos y cotidianos, aún siguen dentro de sí mismos. Transcurren los quehaceres habituales, la casa, comida, algo de huerta o jardín, un poco de cariño a los caballos, caricias a los animalitos pequeños que les acompañan y les solicitan unas caricias.

Vuelve la noche, el cielo se enciende de estrellas, un calor aromático emerge de la tierra y embriaga las sensibilidades deseosas de absorber lo que la vida les brinda sin contrapartida. Lloran, se dicen susurros a sí mismos, pasean o toman una infusión de flores percibiéndose más y más adentro mientras se dejan invadir por la vida de fuera. Algunos cantan, tararean nanas de la infancia, canciones de su niñez, recuerdos guardados en un baúl intangible que ha dormido un profundo y largo sueño, pero que por fin despierta.

Dulce y mansamente el encuentro se acaba, abrazos, bellas palabras de agradecimiento, regresan a sus casas, retoman un ritmo que conocen pero que no es el de ellos, ahora conocen la clave interior de su esencia y recordarán el camino de regreso a casa poco a poco, a medida que las sombras huyen de sus vidas.